viernes, 30 de mayo de 2014

Gigante



Hola a todos,


Pues bien, cuento lo que sucedió hace ya varias semanas atrás, era una mañana en la que tenía esperanzas de encontrar alguna buena pajarera de bonitos y se me ocurrió reestrenar la caña de jigging para hacer algo de currican con ella.

Me meto dentro del agua, un poco antes del amanecer. Lo primero que visualizo son las omnipresentes redes y trasmallos de carácter infinito que plagaban toda la zona.

Pues, a pesar de las redes, en medio de ellas, encuentro un pequeño banco de lachas que nada más atravesarlas con el kayak se sumergen, pero justo cundo el señuelo pasa por encima del banquito zassssssssssssssssss, una picada brutal a la caña de jigging en la que no paraba de salir hilo.



Cojo la caña e intento frenar el carrete, pero por falta de costumbre, en vez de apretarlo lo aflojo jjajajajajajajajajajajajajajajaj, vamos, que al final el animal me había sacado 200 metros de nylon y solo me quedaban 100.

Cuando soluciono el problemilla del freno del carrete, sin mucha dificultad, empiezo a recuperar el pez. Este viene nadando hacia mi a cierta velocidad, pero a unos 20 metros de mi, vuelve a la carga con unos buenos cabezazos y carreras que me hizo pensar que me encontraba ante a un pez distinto a los que acostumbro sacar, se me vino por unos instantes el monstruo que vi este invierno que se comía a los bonitos de 2kg.



Al final, emerge de las profundidades, era un bonito, el bonito más grande que he sacado en mi vida y el pez más grande que he sacado hasta la fecha, ¡¡5kg de puro musculo!! que me dio una buena lucha, pero que solo duró 5 minutos.



Eso de llevar un equipo bastante fuerte y encima con un gran carrete y 300 metros de nylon del 0,40, la verdad, no se, su merito tiene, pero pierde mucho, me hubiera gustado que me picase al trozo de hilo, eso si que hubiera sido bueno, pero todo llegará a su momento.

Eufórico por este gran bonito, intento dar vueltas por la zona, pero nada, redes y más redes. Al final, harto, me centro en el jigging a ver si hay algún denton, y por poco. Había uno que olfateó el señuelo y me dio un buen susto, pero no clavó jajajajajajajajaj, eso si, a pesar que llevaba una caña de jigging, éste lo hice con la mano jajajajajajajaajaj. Donde se ponga un trozo de hilo... jajajajajajajajajaj.

Bueno, este es el último bonito de la temporada, la verdad que empezó como acabó, brutal y difícilmente repetible. Aunque si no hubiera habido tanta sequía, aun podría haber sido mejor.

A ver si me pongo al día pues tengo un poco abandonado el mundo de los blogs, falta de tiempo y desmotivación jajajajajajajja.


Un saludo y hasta otra.


jueves, 8 de mayo de 2014

Jigging extremo desde kayak


Hola a todos,


Bueno, objetivo cumplido, era algo que quería hacer desde el año pasado, fue el motivo del porqué me compré la cámara y ya por fin lo he podido grabar y ni yo mismo me lo creo.

Este año, como el año pasado me propuse centrarme en el jigging, pero el año pasado no pudo ser, demasiados bonitos, demasiado viento, kayak nuevo y  prohibiciones, por lo que mis objetivos se vieron muy mermados. Pero, me supe adaptar a las circunstancias y se me ocurrió hacer jiggng manual, y sin saber muy bien como, una tarde, sucedió el milagro.


Dejo el enlace de esa entrada: http://kayakpasaor.blogspot.com.es/2013/09/un-doblete-de-dentones.html

Después de esa jornada inolvidable, este año me propuse repetirla y no solo eso, grabarla también. Pero parecía una tarea imposible y desesperante, pues muchas han sido las jornadas que he dedicado a repasar roca por roca con un trozo de hilo y un jig buscando los dentones y una cosa es que no pique nada, pero que te se enganche uno y se suelte, que vuelvas otro día y vuelva a pasar lo mismo y que en otra jornada después de tenerlo a mitad de camino va y se suelta. Esto deprime mucho y desespera, pero al final todos esos esfuerzos, enfados y cabreos llegan a su recompensa.


Cuento una salida matutina, como siempre cuando entré al agua ya había salido el Sol, que mal madrugador soy. Ese día quise explorar una nueva zona, un nuevo habitad buscando alguna roca profunda lo que se tradujo en kilómetros y muchos kilómetros en los que no encontré nada digno de guardar en el gps. Algunas zonas con cierta actividad en la que probé unos lances sin esperanza de que picase nada.

Harto de remar y cansado, decido regresar a la orilla a probar unos lances, pero estaba todo lleno de redes, era imposible largar linea.
Encontré un hueco donde lanzar el jig, pero como siempre no pasó nada, hacía calor y me dolia ya el culo de estar sentado en el kayak así que pongo rumbo para la salida.

Saliendo para la orilla, decido hacer una última parada entre un amasijo de redes que parecía un laberinto en la última marca interesante que tenía en el gps. Esta parada era solo para desplegar línea y recuperar el aparejo para marcharme de ahí. Pero ya que estaba, había que probar unos lances a ver que tal.
Primera subida nada, pero en la segunda, subo si acaso un metro y el trozo de hilo se queda "parado" y un fuerte tirón hacia el fondo me confirmaba lo evidente, ¡¡¡tengo uno!!!.

Al principio creía que no era muy grande, pero inmediatamente me di cuenta que aquello era gordo, me daba unos cabezazos impresionantes que no podía casi frenar, salía el hilo a trompicones de mis manos y empezó arrastrarme y a escorarme el kayak. Temí lo peor, que me partiera, pues estaba al límite y más aun sabiendo que la línea que llevaba estaba como "quemada" del currican de fondo, con trozos abrasados y desgastados a demás que era un hilo que ya llevaba su tiempo y muchas fueron sus capturas realizadas.
Pero el pez lo cansé rápido, se rendía e iba ascendiendo, no sin darme algún buen susto a mitad de camino con un gran cabezazo que temía que se desclavase y perderlo.



Pero al final, emerge de las profundidades un precioso denton de 4,5kg, ¡¡¡el pez más grande que he cogido en mi vida y encima pescado con un trozo de hilo!!!!.





Después de poner a buen recaudo tan magnífica captura, vuelvo a largar línea y un segundo dentón le da por "olfatearme" el señuelo, pero solo quedó ahí.

Tal fue la alegría y la inmensa satisfacción, que todo mi cansancio desapareció y continué pescando durante un par de horas más haciendo currican de fondo con el hilo, pero no hubo más picadas y al final salí a la orilla con una felicidad inmensa.





Aquí el vídeo.




Un saludo y hasta otra